domingo, 30 de marzo de 2025

6:11 AM

 Solo me apetece escribir sobre lo que siento, pensamientos recurrentes o aquellas situaciones que me lastiman, estoy en una etapa emocional... puede verse reflejado en mis últimas entradas, tan solo queda atravesarlo y aprender de ello. 

Ahora siento que hay pocas palabras, no existen, me quedé sin vocabulario para poder expresar como me siento ahora, con ganas de todo pero al mismo tiempo sin ganas de nada. Solo deseo que el tiempo transcurra hasta llegar un día en el que mire atrás y diga, "Fue totalmente necesario que me sintiera así", eso supondría que he sido capaz de hacer frente a mis desafíos personales, retos insignificantes para algunos. 

Estoy a  las puestas de sentirme como quiero... pero hay resistencia en ello, no puedo ver que es ¿Cómo puedo descubrirlo? Solo tengo preguntas, muchas, y tal vez, me hago las preguntas incorrectas. 

Es de madrugada, Uff ahora mismo estoy cansada, pero tenía tantas ganas de escribir... apenas dije algo, pero me alivió que es lo importante, me cuesta mostrarme vulnerable aún sabiendo que no me  conocen... es raro.

No quiero ser perfecta, ¿Quién coño quiere ser perfecto? En mi humilde opinión serlo haría la vida aburrida, y tan solo tenemos una... no podemos desperdiciarla aburriéndonos ¿No creen?

sábado, 29 de marzo de 2025

Veneno que actúa como la cura


Hace unos días no entendía el propósito de este capítulo de mi vida, ahora creo que he obtenido una respuesta o eso me gustaría creer.

Solo la experiencia me hizo comprender que ser paciente es esencial, no solo para tener una vida larga sino que también ancha, ya que algunos sueños pueden tardar más de lo esperado en cumplirse, estoy trabajando amablemente en mantener e incluso aumentar la paciencia.

Estos días atrás he tenido un pensamiento recurrente... ¿Cómo será mi propio hogar? 

viernes, 7 de marzo de 2025

jueves, 6 de marzo de 2025

"Amor a primera vista"

  Proceso neuroendocrino diseñado para impulsar a dos personas con una alta histocompatibilidad a procrear. 

La histocompatibilidad es un tipo de información que se transmite de manera inconsciente a través de las feromonas. Estas moléculas, liberadas tanto por hombres como por mujeres, juegan un papel en la atracción de parejas compatibles y en la detección de posibles peligros, entre otras funciones.

El cuerpo nos avisa de que nuestro sistema inmune es compatible con el de la otra persona, dicho proceso ocurre en cuestión de segundos, y después de superar la fase quimio-sensorial, entraría en juego el cortejo, pero nada tiene esto que ver con el amor. 

Podemos concluir que expresiones como "He sentido un flechazo" o "Ha sido amor a primera vista" tienen un fundamento real y una explicación biológica. Después de todo, seguimos siendo animales en una versión moderna.



Recuerdo cuando conocí a MM, en la universidad. Ambos nos cruzamos en la entrada principal y el tiempo se detuvo unos segundos, nos miramos a los ojos y pude sentir ese flechazo. Fue cuestión de segundos. Cuyo recuerdo se ha convertido en algo poco romántico, para convertirse en una alta compatibilidad del sistema inmunitario. 

No me deja de sorprender como el enamoramiento que es mera química, ha inhibido mi razonamiento. Lo sé porque he dicho: "He conocido al hombre de mis sueños".
Pero siendo amable con mi yo del pasado, puedo decir que he conocido a "mi tipo de chico", el cual encaja con los estándares, cultura, estilo de vida y nivel educativo.

Y bien, pero ¿Qué clase de hombre estoy buscando?
 

domingo, 2 de marzo de 2025

Y entonces,

Aparece el hombre de mis sueños y me deja fuera de combate. 

En ese momento estaba lidiando con una situación de trastorno emocional, envuelta en una historia sin fin, que nada hacía por mi bien. 

Adopté conductas que ahora intento desaprender, pensamientos de baja autoestima me invaden en ocasiones, y me esfuerzo para que no influya en mi presente. 

Viví una etapa donde mi pasado estaba acechando mi presente, creando precipitación y destrucción en un vínculo nuevo, ¡Vaya cagada! Así lo digo. Un cóctel de emociones se apoderó de mi.

Haciendo un análisis retrospectivo, vaya a donde vaya, el pasado me seguirá. Los momentos alegres y divertidos quedarán en mi memoria, junto a aquella persona especial que me hizo tenerlos. Lo recordaré con cariño. Y aún así, no podré volver a darle el poder de interferir en mi presente.

Y entonces, el hombre de mis sueños se convirtió en una pesadilla.

jueves, 27 de febrero de 2025

.

 Mi cerebro ya no está generando esas grandes cantidades de dopamina que habían cambiado la química de mi cerebro, mi lóbulo frontal vuelve lentamente a realizar sus funciones, en otras palabras, he podido liberarme de la servidumbre de la dopamina.


miércoles, 19 de febrero de 2025

Algo más cerca de la verdadera esencia

Primera fase

Siéntate, cierra los ojos y comienza a observar tu respiración. Inevitablemente, surgirán pensamientos y sensaciones. No los reprimas; si aparece un sentimiento, simplemente déjalo pasar y regresa a tu respiración. Cuando surja otro pensamiento, obsérvalo, nota cómo nace y cómo muere, y vuelve a concentrarte en la respiración.

Esta fase es fundamental, ya que te prepara para aprender a concentrarte y a centrar tu atención. Es necesario limpiar la mente, pero la manera de hacerlo no es luchando contra ella. Si intentas resistirte a los pensamientos, lograrás el efecto contrario. Cuando nos molestan pensamientos repetitivos, la mejor forma de despejar la mente es aceptándolos y dejándolos fluir. Paradójicamente, al aceptarlos, comienzan a calmarse. En ese momento, puedes fundirte con tu respiración y permanecer plenamente presente en el aquí y ahora.

Segunda fase

Esta fase comienza cuando diriges tu atención hacia la observación de tus pensamientos, tu cuerpo y tus sensaciones. Debes integrar tu cuerpo en la experiencia, recorriéndolo parte por parte, sintiéndolo y aceptándolo sin juzgarlo ni analizarlo.

Después de haber alcanzado un estado de concentración a través de la respiración, comienza a percibir la parte superior de tu cabeza, notando las sensaciones táctiles y la superficie de tu piel. Luego, recorre cada parte de tu cuerpo poco a poco, como si lo estuvieras bañando con tu atención. Con el tiempo, alcanzarás un punto en el que podrás percibir tu cuerpo como una unidad.

Este ejercicio te ayuda a recuperar la conexión con tu imagen corporal. En ese momento, eres testigo de tu propio cuerpo y, al mismo tiempo, lo sientes plenamente. Esta es una técnica budista llamada Vipassana, un método extraordinario para la sanación y la purificación. A través de esta práctica, adoptas una posición de observador, percibiendo tu cuerpo como un todo y aceptando todo lo que sucede en él, sin apego ni rechazo, desde una perspectiva trascendental.

Tercera fase

En esta fase, se practica la observación simultánea. Debes percibir todo tu cuerpo con sus sensaciones corporales mientras, al mismo tiempo, prestas atención a tu respiración. Luego, amplía tu atención a tus pensamientos: ¿qué pensamientos surgen?, ¿cómo se relacionan entre sí?, ¿qué redes de ideas se entrelazan? Obsérvalos de la misma manera en que observaste tu respiración y tu cuerpo: sin juicios ni análisis, aceptando lo que aparece en tu mente, pero colocándote como un testigo imparcial.

Cuando domines esta técnica simultánea, enfoca tu atención en las emociones. Observa los cambios emocionales que surgen, los matices y cualidades de cada emoción. Percíbelas con la misma actitud con la que observaste tu respiración, tu cuerpo y tus pensamientos. Una vez que logres esta observación de las emociones, amplía tu atención para incluir la respiración, el cuerpo, los pensamientos y las emociones al mismo tiempo.

Después, comienza a observar tus imágenes internas con la misma actitud: sin juicios ni análisis. Luego, expande tu percepción hacia los sonidos del entorno, integrándolos en la observación. Finalmente, dirige tu atención al mundo visual.

Cuando logras una observación simultánea de todos estos elementos —respiración, cuerpo, pensamientos, emociones, imágenes internas, sonidos y visión— ocurre algo extraordinario: cruzas un umbral y te conectas contigo mismo de una manera profunda. Pero, ¿Quién es ese "tú mismo" con el que te conectas? No puede describirse con palabras, porque en ese estado, todas las concepciones previas sobre ti desaparecen. Sin embargo, lo que descubres es algo más cercano a tu verdadera esencia de lo que jamás habías experimentado. En ese instante, comprendes que ese "tú mismo" es inseparable de la totalidad.

 Jacobo Grinberg  (Ser o no ser - El sol de media noche TVE)


Puedo recordar que cuando comencé esta práctica tenía 21 años, en aquel entonces no podía describir las sensaciones de mi cuerpo y tampoco las de mi mente, tan solo reconocía que había un antes y un después. Donde el antes era caótico y el después plenitud. Llego a recordar la sensación tan extraña de "flotar", de no querer "despertar". Para lograr esa sensación detenía el tiempo, me colocaba en la famosa postura Sukhasana y podía sentir cada fase de la práctica. En ocasiones, perdía el hilo, pero rápidamente imaginaba un lugar de plenitud para poder retomar la experiencia. Imaginaba un prado verde, muy verde, con hierbas altas, yo corría a través de el con un vestido blanco y el pelo largo, donde el sol brillaba en mis mechones dorados.